La medicina geriátrica intenta poner en funcionamiento el envejecimiento activo. Como sabemos, la inactividad es uno de los males del cuerpo humano. Por esa razón vemos a los médicos geriátricos haciendo congresos para lograr que esa etapa de la vida del anciano le sea lo más beneficiosa posible. También lo hacen para la economía de la sanidad pública.

Tal vez porque dicen soy un caso a imitar, han solicitado mi participación en congresos como ponente. Por esa razón he participado, tanto aquí en Galicia como en Madrid, en alguno de esos congresos. En ocasiones he coincidido en ellos con José Ramón Lete cuando era Secretario para el Deporte de la Xunta en la que en aquellos tiempos había hecho una campaña con el título "La vacuna del Siglo XX", refiriéndose al deporte. Si regresamos al deporte, he comprobado como estos programas de envejecimiento activo funcionan en países como Finlandia o en Nueva York. Sin embargo, lo que más me ha sorprendido sucedió en Miyosaki (Japón) por la gran cantidad de gente que participaba en los 42 kilómetros de la maratón. También los veía participar en el cuidado de parques y jardines. Estas actividades hacen que sean las personas más longevas del mundo.

Un caso extraordinario de envejecimiento activo es el de mi amigo y rival Ed Whitlock. No hace más de un mes, leyendo un periódico de tirada nacional, vi un obituario de personas célebres. Con sorpresa comprobé que el pasado 13 de marzo había fallecido. Fue toda una sorpresa, pues unos cinco meses antes la TV mundial había dado la noticia de que había batido el record del mundo de maratón con 85 años. Fue en Toronto en octubre de 2016, con un tiempo de 3 horas 56 minutos. Whitlock no falleció por un defecto del sistema cardíaco, sino debido a un cáncer de próstata que ya había incubado cuando logró el portentoso registro. Un motivo más de admiración y asombro. Ed Whitlock era cinco años mayor que yo. Con él competí en Sacramento (California) y en Toronto en dos campeonatos mundiales de fondo de 25 kilómetros. Tal vez por suerte, conseguí un mejor porcentaje de rendimiento. Para mí fue un gran éxito vencer a un coloso como Whitlock.

El periodista que realizó el obituario dijo que con él se fue un ejemplo de superación humana, más allá de la tiranía sin defensa que nos impone el tiempo.