A principios de mes de las flores, casi sin avisar, nos dejas para irte a..., no sé realmente a donde te has ido, pero de seguro a un buen sitio. Te lo has labrado muy meritoriamente. Si, si, ya me dijiste, no eres gallego pero te has ganado el aprecio de los gallegos siendo como uno más. Viniste desde tu región leonesa cuando la formaban: León, Zamora y Salamanca. Por casualidades de tu vida pusiste tu barbería en la calle Salamanca (de Vigo, no el Barrio Salamanca de Madrid que bien te merecías).

Y así cuando esta zona de Vigo comienza a crecer, la Peluquería Gildo ahí en la calle Salamanca sin inmutarse, trabajando, viendo, observando lo cotidiano y lo novedoso. Los cambios no te afectan, pasas de corte a tijera, al corte navaja, al corte máquina manual o eléctrica, y siempre tú, Gildo, tratando a tus clientes con maestría profesional y verbal.

Me fastidia nos dejases así huérfanos, y ahora ¿Quién nos va ahora tomar-cortar el pelo? Bueno trataremos de adaptarnos al saber que tú, allí donde estés, seguirás "machacando mucho con el Celta y poco con la política" a esos nuevos clientes que tienes de muy largas barbas entre los que estará tu tocayo San Hermenegildo.

Hasta que nos encontremos, mis mejores deseos para ti allá, y para tu mujer y toda tu familia aquí. Recuerdos presentes. Un saludo Gildo.