Sería fantástico un titular así. Aunque todavía no tengo muy claro en qué nos cambiaría nuestro día a día; ¿estar un poco más cerca del conocimiento de nuestros orígenes?; ¿tener la evidencia de que si en un mísero sistema solar hay vida en al menos dos planetas, es seguro que la habrá en alguna otra galaxia?; ¿preparar la huida, para unos pocos, de un planeta desahuciado? Lo único cierto es que buscamos agua en Marte cuando aún hay miles de personas que mueren en la Tierra por su falta; buscamos la vida en otros planetas cuando la matamos en el nuestro; buscamos la explicación a una atmósfera casi inexistente en un entorno rojo cuando estamos destruyendo la nuestra.

Puedo entender a los científicos que han dedicado su vida a la parte del trabajo que les tocaba para construir una sociedad mejor. Pero, a estas alturas, nadie puede pensar que empresarios y gobiernos inviertan en esta aventura solo por el ansia de conocimiento. Sea como sea, lo que es evidente es que ninguno de esas "notables" personalidades llegarán a disfrutar de su codicia espacial; pero sí, de la agonía de un planeta expoliado en el que no se ha invertido lo mismo.