Como vecina de la calle Álvaro Cunqueiro muestro mi total apoyo con la carta de M. A. Jiménez,publicada el viernes 17 de febrero de 2017. Hasta la fecha, en Vigo, todas las humanizaciones que se han realizado suponían una ampliación de las aceras y reducción del tráfico rodado, para dar calidad de vida a los peatones y residentes de la zona. En esta nueva deshumanización, no solo no han modernizado ni actualizado las aceras del lado derecho (sentido del tráfico) sino que han estrechado las aceras del lado izquierdo.
Además, ya hemos confirmado con el departamento de vías y obras, con el inspector que lleva esta humanización, que pasaremos de dos a tres carriles de circulación en la zona de Gerona con Regueiro.
Y yo me pregunto? ¿qué calle de Vigo, "deshumanizada", con este ancho, soporta tres carriles de circulación? ¿Cuál es el nivel de contaminación acústica y de polución que soportamos los vecinos de esta calle? ¿Qué calle de Vigo soporta el número de líneas de autobús urbano, escolar y tráfico rodado con este ancho? ¿Por qué no se ha construido un túnel en la plaza Independencia para conectar los dos lados de Camelias, como en otras ciudades gallegas en las que se han peatonalizado plazas?
¿Se dan cuenta la cantidad de niños y padres que utilizan las aceras del margen derecho para acudir a los colegios, o a la zona de ocio de la Plaza Independencia? ¿Se dan cuenta que todo el tráfico de la zona (Gerona, Camelias, López Mora, Plaza América, Barcelona, Pintor laxeiro, Pintor Colmeiro) desemboca en la calle Álvaro Cunqueiro? ¿No sería recomendable realizar un estudio profundo para una remodelación de cambio de direcciones o carriles en la zona? Volver a la doble dirección en alguna calle aliviaría este tráfico, por ejemplo Pintor Laxeiro. Además, durante tres días no podemos utilizar la entrada de carruajes por las obras, ante la pregunta: ¿qué podemos hacer con los coches, dónde los aparcamos, hay alguna alternativa en estos casos? (Recuerdo que todas estas calles son zona azul, lo que supone estar poniendo tique cada dos horas) la respuesta ha sido muy sorprendente: siempre se ha hecho así, en todas las obras. Creo que si estamos pagando un vado permanente, el ayuntamiento debería facilitar una alternativa a los vecinos ante esta situación.
Señor alcalde de Vigo y concejal correspondiente, yo les invito a que visiten la zona, hablen con los vecinos y vean cuál es la realidad que sufrimos en el día a día.
Espero que, como nosotras, otros vecinos se animen a mostrar sus quejas y sus padecimientos.
