El conductor de un microbús escolar de 46 años logró salvar la vida de los 8 niños que llevaba en el vehículo, además de un monitor, antes de morir por un paro cardiaco que le dio cuando conducía. Todo ocurrió el pasado martes por la tarde, hacia las cinco, cuando el transporte escolar circulaba por una carretera a la altura de Carmona (Sevilla). El hombre iba al volante cuando le dio un infarto y tuvo dificultades para mantener el control del autobús. Finalmente el vehículo se salió de la vía, si bien en la maniobra sólo resultó un menor herido leve. El conductor falleció tras el desvanecimiento, según informó el Servicio Coordinado de Emergencias 112 de Andalucía, adscrito a la Consejería de Justicia e Interior de la Junta, y fuentes de la Guardia Civil.