Mi consejo, que es gratis total y avalado por la pobreza mental revestida, eso sí, de la misma santa indignación con que ellos alardean del trasnochado sectarismo contra el PP y Rajoy. Y es que cada día que pasa imitan en todo al Panhellenic Socialist Movement (PSOK de Grecia para entendernos), espejo en el que se están mirando y me duele que no se den cuenta que la luna no engaña; aunque haya poca luz, la imagen es clara y nítida. No fue por decírselo cuando en las anteriores elecciones municipales todos les aconsejaron que se alejaran de Podemos y todas sus estrellitas a quienes dieron alcaldías. Y luego vinieron las autonómicas, más de lo mismo, siguiendo erre con erre todos contra el PP despreciando incluso presidencias que el PP le regalaba a cambio de nada. Que la corrupción está presente en todos los partidos es un axioma a tener en cuenta cualitativamente, pero no cuantitativamente. Antes de hablar midamos o pesemos -a metro o a kilo, tanto da, pero no con medidas distintas- la corruptela o descomposición de cada uno y luego hablemos.

Su no es no, dio el mismo resultado que él no pasarán que acaba, como todo lo negativo, en pasada, pues hagan lo que hagan, más bien poco pueden hacer están bailando en una cuerda floja donde cada solución que aparece o se divisa es cada vez peor que la anterior.

Y ahora mismo, ya Rajoy presidente, cuando la cura de humildad debería prevalecer aún echan pecho y ya anuncian que no votarán el presupuesto del 17, que, ¡pásmense!, aún no conocen. Clarividencia se llama eso. Si no cambian no me dará vergüenza que los populares los toreen, lo mismo a U-Podemos, pero la faena va a ser completa. Al tiempo o elecciones.

Sin ánimo de ofensa alguna, alejado de toda chacota haciendo mía la frase que tan bien sabía acentuar D. Manuel: "Sentidiño", o que viene a ser lo mismo como suelen decir los ingleses: "Look after the pennies, and the pounds will look after themselves", copia calcada del gallego viejo; "o que cuida a peseta nunca lle faltará un peso".