Durante años impartí la asignatura de Literatura Hispanoamericana en la Universidad de Vigo. Entre las novelas de carácter obligatorio figuraba "Pedro Páramo" de Rulfo. Abordamos el estudio crítico de la novela con exposiciones orales en las que las intervenciones de los estudiantes fueron altamente clarificadoras y en ellas manifestaron lo mucho que les interesaba el texto. (Desde aquí mi recuerdo y agradecimiento). Cabe señalar que publiqué un estudio, a modo de guía de lectura, "La poesía en Pedro Páramo", que diez años después se seguía vendiendo sobre todo en Hispanoamérica y en el mundo latino de EE UU, donde es una novela de culto. En dicho estudio hablo de cómo a través de los monólogos, como le gustaba a mi maestro Barthes, configuran un canto, el canto de las voces del mundo que está más allá de la familia, del pueblo y la nación; son voces de la humanidad, singularidades puras en cuyo eco resuena la miseria humana y la tragedia del existir y la muerte. La poesía de ahora y siempre.

También impartí cursos de doctorado sobre Borges. Los estudiantes quedaron deslumbrados por la erudición y la finura intelectual de literato, un mundo de referencias que Borges transformaba en un universo fantástico y metafísico. Era el escritor de hipertexto literario más allá de todas las fronteras. Que no le dieron el Nobel, que más da, a veces solo sirve para la vanidad de los escritores y las naciones involucradas. El mejor homenaje que Galicia le hizo a Borges fue el de Luz Pozo en su reciente libro La rosa tántrica. Rulfo son escritores vivos, no necesitan un centenario para tenerlos presentes.