Estos días conocíamos como dos padres desesperados ofrecían 6.000 euros por un puesto de trabajo para sus hijos.

Imagínate que eres uno de los miles de licenciados con hijos al que nunca han llamado del INEM y te llaman de una ETT para trabajar en la vendimia en la zona de Arbo, Salvaterra y As Neves. Imagínate que cuando firmas el contrato aceptas que recibes el material y vestuario necesarios así como el curso obligatorio de riesgos laborales y es mentira. Supón que te ofrecen a menos de 5 euros y a cambio te dicen que lleves tú las tijeras, la ropa, la comida y bebida y hasta el bolígrafo para firmar. Tendrás que desplazarte más de 60 Km. por tu cuenta sin plus de transporte y trabajar de ocho y cuarto a una sin parar y desde las dos hasta las cinco y media de lunes a domingo, haga sol o llueva, cobrando lo mismo y cotizando solo los días y horas trabajados.

Si tuvieses la necesidad de ir al baño, tendrás que ir al monte más próximo y para beber o lavarte un caño de agua para casi cien personas que recuerda tiempos pasados.

Escuché como una peona veterana decía que aquello no podía permitirse y había que sacarlo a la luz, y que no éramos conscientes del poder que teníamos, porque sin peones, la uva se pudriría en la viña y perderían la cosecha.

El plan les ha salido perfecto con la reforma laboral de este gobierno. Han conseguido inculcar el miedo para que esto se vea normal y como un mal menor. Hemos retrocedido a tiempos peores que los de nuestros padres. Pero juegan con la necesidad de millones de hogares en los que no entra ningún ingreso y a los que nadie importa.

Y esto solo es el comienzo, ya que a partir de ahora el Gobierno pagará hasta 3.000 euros a las ETT por cada empleo que consigan a un parado. ¿Para qué existe el INEM y pagamos tanto funcionario? Aún así, y después de todo lo visto y oído, el PP será la fuerza más votada.