Algunos votantes sectarios (pocos y cobardes) están tan preocupados por los próximos resultados electorales que no dudan en utilizar la descalificación sistemática del magnífico hospital Álvaro Cunqueiro para animar a la manifestación que convocan en Vigo y para la que fletan autobuses al más puro estilo de los regímenes de los que reniegan.

Tienen miedo porque la sanidad pública de Vigo mejora con una actuación de su principal enemigo político y hay que desprestigiarlo a toda costa. No tienen problemas en mentir, inventarse precios de servicios o prestaciones como la del sofá-cama para los acompañantes con que cuentan las habitaciones individuales del nuevo hospital, cuando su utilización además de ser completamente gratuita, mejora ostensiblemente el confort de los familiares que acompañan a los pacientes.

Cobarde y sectariamente califican la designación de mujeres para cargos de responsabilidad como una réplica de la Sección Femenina porque no pueden disimular que les molesta que esas mujeres lideren grandes proyectos.

No tienen argumentos de debate, solo la descalificación, los gritos, los empujones, ? ¡no dan para más!