Han pasado meses, algunos hemos estado ausentes, alejados del candelero sin escribir, pero no significa que hayamos desparecido. Pero centrándonos en el meollo de la cuestión. En este tiempo, seguro que te han sucedido miles de cosas en tu vida, puede que hayas pasado un invierno duro, pero ahí estas. Luego llegó la primavera en la que has podido volver a ver las cosas con optimismo y con el verano has tenido la posibilidad de hacer algún nuevo cambio, una oportunidad de trabajo, nuevas metas y horizontes se abren ante tus ojos? Puede que hayas ganado o perdido, todo ello forma parte de tu equipaje, de esa maleta que ha recorrido tanto y en cierto momento has decidido aligerar de peso. Has subido y bajado en estos tiempos de crisis económica, pero dentro de las desventajas has aprendido el cuento de memoria, y formará parte de tu maleta y en algún momento te podrá ser útil,aunque ello hoy te cause llanto. Pero no olvides que cuando tus fuerzas mengüen, las cosas se hagan más complicadas y cuesta arriba. Acuérdate de esas viejas palabras de tu madre o abuela: "Siempre que llueve, siempre escampa", viejo consejo de la madre naturaleza y las personas que te quieren. Ellos/as han caminado hace tiempo por los mismos senderos o parecidos. Su veteranía te puede ayudar a entender. Puede que hoy estés perdido/a, que no sepas donde vas, pero recuerda de dónde vienes y te sentirás bien.

No olvides que tú puedes sacarte esa piedra del zapato y continuar tu trayectoria, en avión, por tren, por mar o por lo que sea?Tú puedes seguir adelante.

Abre los ojos y mira hacia arriba y disfruta de las cosas buenas de la vida. Puedes patalear, lamentarte, llorar, gritar, enojarte, sentir cólera, angustia, agonía, tristeza, vacío? pero todo ello indica que estas vivo/a y que estas a tiempo de poder cambiar el rumbo de tu vida.

Siéntete feliz de haber perdido la batalla? hoy no sabes el, ¿por qué? Pero algún día lo sabrás, será tarde? Pero solo puedo decir que hoy, tú te marchas en paz.