En un anticipo de la fiesta de los Reyes Magos, el vicepresidente de la Xunta, señor Quintana, y la conselleira señora Táboas anuncian para Vigo 7.500 viviendas de promoción autonómica en cinco años. Sin importarle la enorme crisis que pasa el país precisamente por el exceso de viviendas construidas y de una manera groseramente demagógica, se aprovechan de la necesidad de vivienda para jóvenes que desean emanciparse para crear falsas expectativas a sabiendas de que se trata de cifras imposibles de cumplir. El coste de esas 7.500 viviendas a un precio tirando a bajo sería de 150.000 millones de pesetas. ¿Es posible que alguien crea que la Xunta de Galicia puede financiar esa cantidad sólo en Vigo (acabo de escuchar un plan todavía superior para A Coruña), en un contexto de restricción del crédito bancario como no se recuerda en España? Llegados a estos límites pienso que el presidente Touriño debería inmediatamente desmentir a su vicepresidente, salvo que ambos piensen que los gallegos somos ignorantes a los que se puede mentir de forma gratuita.