Quinín es un simpático cerdo que saltó a la fama en 2008 cuando se libró de su San Martín porque no era un puerco cualquiera. Se comportaba como si fuera un perro, muy sociable y cercano. Desde entonces, vive en una finca en Carral (A Coruña), donde ya no se pasea como antes, pero sigue siendo igual de querido por los vecinos y los muchos visitantes que se acercan a verlo. Se ha convertido en toda una atracción turística.