Las traducciones automáticas vuelven a jugársela al grelo, uno de los productos más característicos de la gastronomía gallega. Si hace dos años era Google el que colocaba en el mapa cibernético al amargo vegetal por traducir el nombre de la verdura como 'clítrois', ahora es Facebook el que coge el testigo y vuelve a asignarle el nombre del órgano sexual femenino.

El error de traducción, que en esta ocasión se produce con motivo de los Premios Grelo de OuroGrelo de Ouro, llega además por partida doble. Mientras que en español la red social de Mark Zuckenberg traduce grelo como clítoris, en inglés va un poco más allás y esoge el término pussy (vagina en español) para referirse al vegetal. Así, el Premio Grelo de Ouro se traduciría en ambos idiomas como 'Clítoris de Oro' o 'Pussy of Gold', tal y como adelantó el diario digital 'Galicia Confidencial'

Con Google empezó todo: el grelo se hizo clítoris

La 'confusión' de los servicios de traducción automática de Facebook no es una exclusividad de la red social que presume de ser la más grande del mundo. El buscador de referencia para muchos, Google, convirtió en tendencia a la localidad gallega de As Pontes cuando tradujo de forma errónea la Festa do Grelo para convertirla en la Fiesta del Clítoris.

Hasta un año se tomó el traductor de Google para corregir el fallo. El error, se justificaba el buscador, atendía a una jerga barriobajera brasileña (de hecho, el diccionario informal de Brasil recoge grelo como clítoris). No es el único error que se puede registrar intentando traducir algunas de las fiestas patrias gastronómicas más destacadas. Si a los vecinos de Carril se les diera por acudir a este traductor digital, el resultado podría inducir a error, atrayendo a su territorio a turistas extranjeros interesados más en las ciruelas que en las almejas.

Cómo corregir el traductor de Facebook

El fallo del traductor automático de Facebook tiene solución. Aunque no es instantánea, requiere de la colabaración de los usuarios de la red social para que el equipo técnico se ponga manos a la obra. El remedio es tan simple como dar la peor puntuación a la traducción. Solo acumulando las suficientes reclamaciones se procederá al cambio.

Al margen de las bromas que se puedan hacer por la traducción, este tipo de fallos son un lastre para la monetización que hace Facebook por algunos de sus servicios ya que puede dañar la imagen y reputación de personas, empresas o marcas.