La afición de los británicos por la cerveza es legendaria pero esto se pasa de castaño oscuro. Este pasado sábado en la ciudad de Reading, un hombre se levantó por su propio pie tras ser arrollado por un autobús y desplazado seis metros, y se fue a un bar a tomarse una cerveza.

Así informa el diario ´The Guardian´. Simon Smith, de 53 años, caminaba por una calle de la ciudad inglesa. Cruzaba una carretera sin señalizar, y ya estaba a punto de llegar a la acera cuando un autobús público le pilló por la espalda. El momento del atropello fue captado por una cámara de seguridad, y en él se aprecia cómo el hombre sale despedido por la fuerza del impacto a unos veinte pies -seis metros- de distancia.

A pesar del tremendo golpe, el hombre solo sufrió arañazos y moratones, y pudo ponerse en pie por sus propias fuerzas. Y entró en el primer sitio que tuvo a mano: un pub.

La policía se personó en el lugar de los hechos y declaró desconocer el motivo del suceso, que dijo que investigaría a fondo.